Power Point como recurso literario

Hasta el momento, Power Point había sido una herramienta  omnipresente en cualquier clase o ponencia científica. Ya sea en sus formatos más aburridos ( listados interminables de “muletas mentales” para que el docente engarce  un discurso mínimamente entendible) o en los más vistosos ( lleno de fotos, videos o dibujos animados que entran y salen de la pantalla en medio de cualquier tornado), el PP ( mucho más famoso que el partido de idéntico acrónimo) monopolizaba cualquier tipo de discurso público: las consultoras abandonaron el informe clásico en Word por el simple y efectivo manualillo en PP; los organizadores de congresos pasaron a exigir la entrega del PP en lugar de la clásica redacción de la ponencia. Hasta las cuentas de resultados de cualquier empresa se embutían en él.

Justo cuando parecía que comenzaba el inicio de su declive, en el momento en que volvía a redescubrirse el encanto y frescor de la conferencia “ a pelo” , sin papel leído ni apoyo audiovisual alguno, Jennifer Egan vuelve a reivindicar el poder del PP, nada menos que como instrumento literario.

Hacíamos referencia en la última entrada a su novela, premio Pulitzer 2011, de título El tiempo es un canalla (a visit from the goon squad ).En ella se despedaza el curso y los desgastes del tiempo, reconstruyendo la previsible trayectoria lineal de una serie de personajes ligados  a la producción musical, en una caótica y aparentemente inconexa relación de experiencias, a la manera de las peripecias de los múltiples protagonistas de los Soprano, según contaba la propia novelista.

Y entre ellos, la cuenta del collar que aporta a la narración la hija de una de las protagonistas, Sasha Blake, se realiza a través de más de 70 imágenes de Power Point, en la que expone la importancia de la pausa en las canciones de rock’n roll. Y mediante la cual descubrimos, además de la vida de Sasha Blake vista desde los ojos de su hija, que la preciosa Mighty Sword de The Frames tiene una pausa de ¡un minuto 14 segundos¡ O que entre las canciones de pausas más relevantes se encuentran Bernadette de los Four Tops, Foxey Lady de Hendrix, Young Americans de David Bowie, Fly like an eagle de Stev Miller Band, Faith de George Michael, Roxanne de Police  o la gloriosa Long Train Running de los Doobies.       

¿Pero es necesario un instrumento como el PP para contar esto? ¿Tiene sentido recurrir a él como forma de enriquecer y potenciar la trama o no deja de ser una mamarrachada para dárselas de moderna? ¿ Es inevitable que alguien nacido en los últimos veinte años deba recurrir a este tipo de formatos para poder expresar sus sentimientos?

Juzguen ustedes mismos.  Personalmente , y aunque debo reconocer que esas 70 páginas de power point son capaces de convencerme aceptablemente de lo que cuentan, sigo creyendo que no son precisos artilugios modernos para poder escribir una buena novela. El tiempo es un canalla lo es. Sin necesidad de inventos.

(Imagen tomada del libro de Jennifer Egan)

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